Tener o no tener acceso a la internet era el dilema del pasado. La
cuestión ahora es cómo se accede a la misma, si por el procedimiento
de marcado a través de una línea telefónica (dial up), o mediante el
más rápido y eficaz "pero también más caro acceso por banda ancha.
Según un estudio recientemente publicado por The Pew Internet
& American Life Project, una organización no lucrativa dedicada a estudiar
el impacto de la internet en la sociedad, más allá de las diferencias
en velocidad y precio, la forma de acceso en línea determina la existencia
de dos tipos de internautas: los que se limitan a ser receptores pasivos
de los contenidos de la internet, y aquellos que además de recibirlos
los modifican, crean e interactúan con los mismos.
"La información que tenemos nos dice que muchos de los usuarios
que acceden a través de banda ancha desde su hogar, crean contenidos
para la web, y comparten archivos con otros", dice Lee Rainie, director
de Pew. Añade que estos usuarios son creadores y distribuidores activos
de contenidos de la red.
El estudio, titulado The Broadband Difference, señala que 24
millones de usuarios americanos (el 21% del total) cuenta ya con acceso
a la internet de alta velocidad desde el hogar, habiéndose multiplicado
por cuatro desde el año 2000 en que eran sólo seis millones. De ellos,
el 39% ha aportado algún tipo de contenidos, ya sea creando páginas
web, haciendo constar su opinión o comentarios en otras páginas, o
creando diarios en línea, por citar algunos ejemplos.
Brecha de acceso
Entrar en línea por banda ancha no se traduce sólo en mayor
rapidez, sino también en mayor disponibilidad de acceso. Los usuarios
que lo hacen a través de marcado tradicional saben que mientras navegan
por la internet, la línea que utilizan está ocupada y por tanto no
disponible para el uso normal del teléfono.
Esa es una de las razones por las que sus conexiones son más
cortas y esporádicas que las de quienes tienen acceso permanente. Así
el estudio muestra que un 68% de los usuarios de banda ancha manifiesta
que hace más consultas en línea gracias a esta accesibilidad permanente
y no exclusiva. Igualmente el 61% dice pasar más tiempo en línea desde
que cuenta con este tipo de acceso.
Ello suscita la cuestión de si a la brecha digital existente
entre quienes cuentan con acceso a la internet y quienes no lo tienen,
viene a sobreponerse una segunda brecha entre los que acceden por marcado
y los que lo hacen por banda ancha.
"Definitivamente, hay una barrera entre la gente que usa la
internet a alta velocidad y los que no lo hacen. Hay muchos más recursos
disponibles para usuarios a altas velocidades, tales como acceder a
documentos de gran tamaño, archivos de información, y software", dice
Víctor Hwang, director operativo de la Alianza Tecnológica Regional
de Los Angeles (LARTA).
Precio
Según expertos en la materia, el precio del acceso por banda
ancha es uno de los factores que evita que un segmento más amplio de
la población cuente con este servicio. Algunos creen que esto cambiará
en el futuro.
"Yo creo que cuando haya suficiente competencia en el servicio
de acceso por banda ancha a la internet, los precios bajarán considerablemente",
dice Chris Weisdorf, representante regional, de la Asociación de Usuarios
Residenciales de Banda Ancha (RBUA), una organización con sede en Canadá
que representa a usuarios tanto de ese país, como de Estados Unidos,
quien considera que el sector esta dominado por "monopolios" del cable
y las telecomunicaciones.
Hwang, por su parte, coincide en que los precios bajarán, pero
no así en que no haya suficiente competencia:
"Es muy probable que los precios bajen, ya que existe una saludable
competencia entre los proveedores del servicio. En un principio éstos
crearon un volumen de capacidad más alto que el que la demanda justificaba
y los consumidores pueden beneficiarse de ello obteniendo precios más
bajos", dice el especialista.
A este respecto Weisdorf añade: "El volumen de utilización respecto
a la capacidad total de banda ancha en la región norte de América es
de un patético 20%. De ahí que tampoco sea una sorpresa que la industria
de las telecomunicaciones esté sumida en bancarrotas masivas".
Los precios, no obstante, continua siendo un freno al consumo.
"El precio del acceso por banda ancha hace que no sea un servicio
para todos los consumidores. Es como las diferencias entre un Lexus
y un Chevy. El Lexus no es para todo el mundo, y no bajan su precio
para hacer que así sea", dice Bruce Leichtman, presidente y analista
principal de Leichtman Research Group (LRG), una firma especializada
en analizar el impacto de la adopción de servicios de banda ancha.
No obstante, el experto indica que si se cumplen las previsiones
alcanzadas por los estudios de mercado de su compañía, según las cuales
la mitad de los usuarios de la internet lo hará a través de banda ancha
en 2007, será necesario bajar el costo de acceso: "Los precios tendrán
que ser más comparables a los de marcado, alcanzando quizá niveles
mínimos de entre 30 y 35 dólares por mes".
La elite de banda ancha
El informe Pew señala que el acceso a la internet por banda
ancha tiene un impacto que mide el estilo de vida de sus usuarios,
particularmente de aquellos denominados, la elite de banda ancha, formada
por quienes realizan 10 o más actividades diarias distintas en línea.
Entre las características de esta elite el informe cita, entre
otras, que los mismos hacen más trabajo desde casa, ven menos televisión,
buscan más noticias en línea, y dedican menos tiempo a comprar en comercios.
Otros de los resultados que incluye el informe es que el 25% de los
usuarios de banda ancha (y 58% del total de los trabajadores a distancia)
trabaja más tiempo desde casa, que antes de tener este servicio.
Pero lo que los expertos encuentran más difícil de medir es
si estos cambios mejoran globalmente la calidad de vida del usuario:
"Con el acceso rápido se ahorra tiempo en muchas actividades
en línea. Pero la conveniencia y facilidad de la conexión impulsa a
estos usuarios a estar más tiempo conectados, el cual sustraen de otras
actividades", dice Rainie, señalando que ello va en detrimento de leer
"en papel", comunicarse por teléfono y otras actividades tradicionales.
Según el informe de Pew, tres cuartas partes (76%) de los usuarios
de banda ancha dice que la internet ha mejorado sus contactos con amigos,
frente al 68% de los usuarios que acceden por marcado tradicional.
Para Leichtman, lo único que puede decirse por seguro es que
el acceso rápido mejora la experiencia en línea: "Yo no diría que [tener
acceso de banda ancha] tiene un gran impacto en la calidad de vida
del usuario, sino que mejora su experiencia de conexión. Hay menos
frustración por descargas lentas, desconexiones, o tener la línea de
teléfono ocupada".
Más información: http://www.pewinternet.org/
SIDE BAR: Acceso por banda ancha (en Estados Unidos)
Número de usuarios: 24 millones (21% del total)
Actividades realizadas:
Crea contenidos para la red: 39%
Comparte archivos con otros: 43%
Pone fotos en la red: 43%
Descarga juegos o videos: 63%
Descarga música: 50%
En un día promedio:
El 81% de ellos inserta o comparte algún tipo de contenido en
la red en un día promedio
El 78% descarga algún tipo de información
Opinión de sus usuarios:
-Un 68% dice buscar más en la internet gracias a que tiene acceso
permanente a la red.
-Un 61% dice pasar más tiempo en línea desde que tiene banda
ancha
-El 86% dice que la internet ha mejorado su capacidad de aprender
nuevas cosas
-El 65% dice que la internet le ha ayudado en sus hobbies e
intereses
-El 65% dice que ha mejorado su capacidad de comprar
-El 55% opina que la internet ha mejorado la forma de realizar
su trabajo
- El 47% dice que ha mejorado su capacidad de encontrar información
sobre salud y cuestiones médicas.
Cómo ha afectado la distribución del tiempo de sus usuarios:
El 37% dice ver menos televisión
El 31% dedica menos tiempo a comprar en comercios
El 18% lee menos periódicos
El 13% pierde menos tiempo a causa del tráfico
Un 8% dice dedicar menos tiempo a la familia (mientras que un
5% dice que dedica más)
Fuente: Pew Internet & American Life Project
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